Descripción

Bálsamo limpiador facial formulado a base de tres texturas que evolucionan al contacto con el agua durante la rutina de limpieza. Empieza como un bálsamo geloide, que se funde en sedoso aceite y finalmente emulsiona en deslizante leche. La piel queda completamente libre de cualquier impureza acumulada a lo largo del día (maquillaje, sudor, grasa, contaminación, spf…) y perfectamente acondicionada para seguir a continuación con su rutina de cuidado diario. ¡Déjate llevar a una nueva experiencia!

Acciones

• Limpiadora.
• Detoxificante.
• Flexibilizante.
• Unificadora del tono cutáneo.

Principios Activos

LAURATO DE SACAROSA (Sucrose Laurate): Limpia suavemente la piel, sin dejar tirantez, por eso es buena su tolerencia en pieles sensibles. Reduce la tensión cutánea superficial producida por los residuos que se acumulan debido al uso diario de aguas potabilizadas. Permite que texturas aceite se conviertan en texturas leche al contacto con el agua.

ESTER DE SACAROSA (Sucrose Stearate): Proviene de los ácidos grasos esterificados del Aceite de Coco. No irrita la piel, la hidrata sin engrasarla, dejando una leve película para protegerla, evitando la pérdida de humedad y aportando elasticidad. Repara el manto hidrolipídico.

GLICERINA (Glycerin): De origen vegetal, penetra en el estrato córneo incrementando la captación de moléculas de agua, preservando los recursos naturales de hidratación de la piel. Es una sustancia “higroscópica”.

ÁCIDO CÍTRICO (Citric Acid): Mejora el tamaño de los poros, eliminando las células muertas acumuladas y que dan ese efecto de dilatación. También preserva el equilibrio entre los estratos más superficiales de la piel. Ilumina y unifica el tono de la tez.

Composición

CAPRYLIC/CAPRIC TRIGLYCERIDE, GLYCERIN, AQUA, SUCROSE LAURATE, SUCROSE STEARATE, PROPYL GALLATE, CITRIC ACID, TOCOPHEROL, TOCOPHERYL ACETATE, BHT.

Resultado

La piel disfruta de tres texturas durante su rutina de limpieza total.

Modo de Aplicación

Aplicar 3ml en la palma de la mano y extender por rostro, cuello y escote. Primero masajear enérgicamente hasta transformar su textura en un agradable aceite. Después, con las manos ligeramente humedecidas, trabajar el producto con movimientos circulares suaves hasta convertirlo en leche y arrastrar el maquillaje o restos de impurezas totalmente. Retirar con agua y secar.